HOMENAJE A VÍCTOR BARRIO: EL TOREO LO HIZO INMORTAL

Texto Elena G. Sánchez | Fotografía Pablo Cobos
No debió morir. No tenía que morir. Parecía imposible que algo así ocurriera, se repite una y mil veces Raquel, la mujer de Víctor Barrio. La tarde del 9 de julio se nos fue un torero, y casi dos meses después, el 4 de septiembre, volvimos a sentirlo más cerca que nunca en Valladolid.